Autor:
Antonio
Explorando la existencia del mal y el sufrimiento en un mundo creado por un Dios todopoderoso, omnisciente y benevolente
El problema del mal es un tema central en la filosofía de la religión, ya que desafía la concepción tradicional de un Dios todopoderoso (omnipotente), omnisciente (omnisapiente) y benevolente (omnibenevolente). Si tal Dios existe, ¿cómo puede haber maldad y sufrimiento en el mundo? Este ensayo explorará el problema del mal, las diversas respuestas a este problema y las implicaciones para la existencia de Dios.
La naturaleza del problema del mal
El problema del mal puede entenderse como un problema tanto lógico como probatorio. El problema lógico del mal argumenta que la existencia del mal es lógicamente incompatible con la existencia de un Dios omnipotente, omnisciente y benévolo. Si Dios conoce el mal, tiene el poder de prevenirlo y desea hacerlo, entonces el mal no debería existir. Dado que el mal existe, parece que Dios carece de uno o más de estos atributos o no existe en absoluto.
El problema evidencial del mal, en cambio, se centra en la observación empírica del mundo. Sugiere que la cantidad y los tipos de mal que presenciamos en el mundo hacen que sea poco probable que exista un Dios omnipotente, omnisciente y benévolo. Esta versión del problema no afirma que sea lógicamente imposible que Dios y el mal coexistan; más bien, argumenta que la existencia del mal hace menos probable que exista tal Dios.