2023-03-24

353.- La culpa


Autor: Bernat

El libre albedrío es un concepto vacío que no tiene sentido puesto que no puede escapar de la tautología a la hora de definirlo. Ni siquiera los diccionarios se ponen de acuerdo en su definición, y ni siquiera las propias personas que intervienen en un debate sobre él pueden definirlo de forma concreta y concisa. Se pretende que el libre albedrío consista en la capacidad de obrar o de no obrar por propia voluntad, pero el concepto “voluntad” incurre, otra vez, en una tautología al pretender implicar la libertad de acción.

El único concepto válido para libertad es “la ausencia de obstáculos que impidan llevar a cabo nuestros gustos, deseos o preferencias”. Pero el libre albedrío va mucho más allá de la mera libertad o ausencia de obstáculos para realizar nuestros deseos, sino que implica algo imposible: la culpabilidad. Y es que la culpabilidad es otro de esos conceptos indefinibles y del que cualquier intento de definirlo incurre también en una tautología. Culpabilidad significa que alguien es culpable, y ser culpable significa que alguien tiene la culpa de haber cometido una mala acción. Pero debemos preguntar, otra vez, en qué consiste “tener la culpa”, y de ahí no salimos. Los juristas utilizan otro concepto que quizás nos ayude a entender la culpabilidad: la reprochabilidad. Aun así, dicho término tampoco puede definirse claramente. Por mi parte, lo definiría como la justificación para poder descalificar, insultar, agredir, en definitiva, para justificar nuestro odio, ira o venganza a partir de la cual, a su vez, se justifica el castigo.

Según el Diccionario Usual del Poder Judicial, se define reprochabilidad como “Carácter antijurídico de una acción que posibilita sancionar penalmente al autor por no haber actuado de otra manera, cuando tenía la posibilidad de hacerlo.” Ni siquiera los juristas pueden ofrecer una definición clara. Esa misma definición sigue incurriendo en alguna que otra gratuidad, tal como es la afirmación de que el autor podría haber actuado de otra manera. ¿Cómo saben los juristas que un individuo podría haber actuado de otra manera? Por otro lado, se dice que tal hecho “permite sancionar penalmente” al autor. Pero, ¿qué es lo que “permite” sancionar o castigar? Se supone que lo que permite sancionarlo es el hecho de ser culpable, con lo cual, volvemos al inicio.

Es incalculable la cantidad de malabarismos jurídicos y filosóficos que se escrutan entre los propios juristas y filósofos de derecho penal sobre ese tema. Es imposible llegar a un acuerdo por el hecho de que el origen de los conceptos “culpabilidad”, “reprochabilidad” o “castigo” son producto de los sentimientos viscerales, y no de un proceso racional.

All final, la culpa es un concepto forjado a partir de los múltiples sentimientos heredados de la evolución. Son todos los sentimientos que se encuadran dentro de la agresividad necesaria para defender las crías, las hembras, el territorio o los alimentos. En el ser humano, dichos sentimientos, se han sofisticado más, llegando a desembocar en venganza, sadismo o crueldad, sentimientos que difícilmente se encuentran en los animales.

El hombre, con todos esos sentimientos viscerales, necesita culpables para poder satisfacer sus ganas de reprochar, castigar, en definitiva, de satisfacer el odio, la ira, la rabia, incluso poder justificar la venganza. Pero, no es menos cierto que, a lo largo de la historia, toda esa agresividad ha servido para amedrentar la conducta no deseada de los otros, y eso es lo que se convirtió en el “castigo”. Si el hecho de agredir, sea verbalmente o físicamente, a alguien servía para disuadirlo en un futuro de cometer un acto no deseado por la sociedad, esa agresión se practicaba con la doble finalidad de satisfacer los sentimientos agresivos, por una parte, y la evitación de la repetición de los actos delictivos, por otra. No existe la culpa, por tanto, tal como la conocemos, sino que existe como justificación para reprochar la mala conducta pero desde esos sentimientos morbosos que satisfacen las pasiones más bajas en el ser humano. Pero también es cierto, que el concepto “culpabilidad” se hace necesario a la hora de aplicar los castigos que impone la ley. Necesitamos una terminología jurídica que utilice ese concepto aunque sólo exista teóricamente.

Toda esa argumentación prescinde por completo de otro hecho que, por sí mismo, elimina la culpabilidad, tal como es el determinismo. Pero, como la existencia de causas detrás de cada acción humana es, por ahora, imposible demostrarlo, me he permitido buscar otra vía de razonamiento para desmantelar tanto el concepto de libre albedrío como el de culpabilidad. De hecho, no se necesita que el determinismo sea cierto para eliminar el libre albedrío y la culpabilidad, tal como he demostrado, puesto que ambos son conceptos tautológicos que no se pueden definir con precisión, por lo que no tienen un contenido semántico claro y preciso, sino que resultan ser verdaderas “pseudoideas” o “paraideas”.

La necesidad de defender la sociedad de la delincuencia en general, a través de los sistemas jurídicos y penales, es la única justificación para el castigo. Y, además, dicha justificación prescinde tanto del libre albedrío como de la culpabilidad, puesto que tanto si el hombre es libre como si no, y tanto si es culpable como si no, no podemos dejar de castigar a los delincuentes e infractores de la ley como mecanismo de defensa social. El libre albedrío no justifica el castigo, sino que se funda en una falsa idea heredada de tiempos pasados pero que se hace necesaria para aplicar la “justicia divina” y sus correspondientes castigos más allá de la muerte. Sin el libre albedrío, el cristianismo, y cualquier religión basada en el castigo, queda hecha añicos. No obstante, insisto en que tanto con libre albedrío, como sin él, ningún castigo divino puede tener razón de ser si no tiene como finalidad la defensa de la sociedad, pero como el castigo divino se aplica más allá de la muerte, queda fuera de dicha finalidad de defensa, por lo que se convierte en una verdadera aberración al constituir un acto de crueldad inútil y, por tanto, perverso.


2023-03-18

352.- Abundando en el Método Científico (y IV)


Autor: Riskov

La ciencia es un desarrollo de la mejor filosofía. Cuestiona todo, comprueba de la manera más objetiva posible considerando los sesgos personales, no acepta nada que no haya sido comprobado y siempre con conclusiones provisionales y abiertas. La ciencia nunca se queda sin trabajo: persigue nuevos descubrimientos, incluso un posible refinamiento de sus métodos. Por ello es opuesta al dogma (inamovible) y a la fe (aceptar sin evidencias).

El conocimiento obtenido por la ciencia es comprobado, nada equivalente al conocimiento proveniente de una deidad o de una autoridad (entrada 348). En el New Age actual se da mucho el “porque lo he dicho yo” (entrada 276).



En el caso del conocimiento proveniente de Dios, o bien es perfecto o es falso. Difícilmente podemos entender que haya un término medio, con aciertos parciales. Vistos los mensajes que hemos recibido de las diferentes religiones, parece evidente que todos ellos son falsos.

2023-03-13

351.- Críticas al Método Científico (III)


Autor: Riskov

- ¡La ciencia no es la única fuente de conocimiento!

La base fundamental de la ciencia es el conocimiento suficientemente comprobado y provisional. El campo de la ciencia es todo aquel que puede ser estudiado y capaz de obtener conclusiones universales. En otros campos de nuestra cotidianidad, así como de nuestros gustos, no necesitamos a la ciencia. Esta no pretende ser la única aunque en su campo ha demostrado los mejores resultados.

Por otra parte, mucha gente se siente cómoda con la evidencia anecdótica, un resultado que les salió bien y creen tener conocimiento fiable y universal sobre ese tema. Pero el método científico nos ofrecerá una gran cantidad de datos y unas conclusiones con las que se puede asegurar casi al cien por cien que el resultado es certero, reproducible, predictivo y traza un modelo análogo a la realidad (entrada 168).

- ¡Pero la comunidad científica está sometida a intereses!

Sí. La investigación es cara y depende de quien la financie. Los estados y empresas gestionan casi toda la ciencia. El científico independiente y solitario casi ha desaparecido porque no puede competir con los grandes equipos bien dotados, considerando el nivel de conocimiento acumulado. Por ello, la investigación se inclina hacia objetivos deseados por aquellos.

2023-03-06

350.- Abundando en el Método Científico (II)


Autor: Riskov

El método científico es una modificación, incluso oposición, de los valores fundamentales del conocimiento religioso: la revelación, la autoridad y la tradición. ¿Y es mejor que estos?

Vamos a tratar el método científico desde una óptica más divulgativa que técnica, confrontándolo con otros tipos de conocimiento (mejor dicho, creencias de conocimiento).



El método se ha desarrollado para comprobar de la mejor manera las hipótesis, disminuyendo los sesgos subjetivos. Las hipótesis se ponen a prueba para poder seguir por ese camino; si, por el contrario, los experimentos contradicen la hipótesis, la descartaremos y buscaremos una nueva. En las pruebas hay repetición, revisión inter-pares (todo experimento debe ser publicado incluyendo datos, material y métodos) y replicación por otro equipo independiente.

2023-03-02

349.- Abundando en el Método Científico (I)


Autor: Riskov

Los valores fundamentales del conocimiento religioso son la revelación, la autoridad y la tradición. Con estas bases cada religión fija su doctrina.

La revelación es el mensaje que Dios transmite a la humanidad por medio de los profetas. Como hay mensajes diferentes, incluso incompatibles, y profetas para todos los gustos, se han desarrollado diversas religiones. Al respecto trata la entrada 193, que termina preguntándose:

Un presunto libro perfecto dice que el hijo de Dios fue crucificado y resucitó, otro dice que murió de esa forma pero que no resucitó y escondieron el cuerpo, mientras que el tercero dice que no murió en la cruz, sino que lo cambiaron por otro y él pudo escapar. ¿Cómo pueden ser libros infalibles los tres?

La autoridad también es diferente para cada grupo. Algunos de ellos, como los católicos, tienen establecida una autoridad que sigue fijando doctrina (incluso infalible, cuando se expresa “ex cathedra” (desde la cátedra). El Concilio Vaticano I expresó en 1870 así el dogma de la infalibilidad papal:

2023-02-24

348.- ¿Quiénes son los buscadores de la verdad?


Autor: Riskov

Filosofía significa amor por el conocimiento. Los filósofos son los que han buscado la verdad. Pero, ¿a qué podemos llamar filosofía? ¿La circunscribimos a su disciplina académica? ¿A los libros de los filósofos profesionales? Sin duda, estos son recursos valiosos pero el amor por el conocimiento no se limita a estos.

La ciencia es un desarrollo de la filosofía, proviene de ella, tal como expuse en la entrada 208, que inspira esta redacción.

Hay quien defiende que la filosofía se encuentra por encima de la ciencia y, en consecuencia, los filósofos son los encargados de llegar a conclusiones mejores que los científicos. Como si estos se limitasen a aplicar un método y obtener datos, mientras aquellos estuviesen mejor preparados para responder las cuestiones fundamentales.

Sin duda, lo anterior es un intento de primacía de la filosofía y de proporcionar trabajo a los titulados que actualmente no tienen buenas salidas. ¿Pero en qué sentido los filósofos profesionales están mejor preparados? ¿El amor por el conocimiento se obtiene cursando unas asignaturas de historia de la filosofía o de leer algún libro antiguo? ¿Leyendo a Platón comprenderemos mejor los datos provenientes de la ciencia?

2023-02-13

347.- Los Secretos de Fátima (y III)


Autor: Riskov

Los tres niños pastores que nos acompañan en estas tres entregas profetizaron que cinco meses después la Virgen aparecería y realizaría milagros. Muchos fueron a presenciar el evento, en octubre de 1917. Algunos asistentes dijeron haber visto a la Virgen, muchos otros «vieron» al sol danzar y emitir luz multicolor, mientras otros presentes dijeron no haber visto nada. La única fotografía del sol realizada ese día tampoco muestra nada inusual.

La elevada afluencia se vio favorecida por una situación política crispada dentro de Portugal, en un contexto internacional de guerra mundial.

Los sucesos fueron aceptados oficialmente como un milagro por la Iglesia católica en 1930. El Vaticano, incluso, llegó a decir años después que el papa había sido testigo del milagro del sol desde los jardines vaticanos.

Con tantos y tan importantes testigos queda claro que el sol bailó y emitió luces de colores. Lo malo es que, excepto el papa, nadie de fuera de aquella localidad vio nada. ¿Un sol local, quizá? ¿Y aquellos que dijeron no haber visto nada anormal eran ateos negacionistas?

2023-02-08

346.- Los Secretos de Fátima (II)


Autor: Riskov

La tercera parte del secreto fue escrita «por orden de Su Excelencia el Obispo de Leiria y de la Santísima Madre....» el 3 de enero de 1944. Lucía escogió la fecha de 1960 para revelar el secreto porque pensó que «para entonces será más claramente entendido». El texto del tercer secreto fue revelado por el papa Juan Pablo II, el 26 de junio de 2000.

Reza:

"Después de las dos partes que ya expuse, vimos al lado izquierdo de Nuestra Señora, un poco más alto, un ángel con una espada de fuego en la mano izquierda. Al centellear despedía llamas que parecía iban a incendiar el mundo. Pero, se apagaban con el contacto del brillo que de la mano derecha expedía Nuestra Señora a su encuentro. El ángel, apuntando con la mano derecha hacia la tierra, con voz fuerte decía: «Penitencia, penitencia, penitencia». Y vimos en una luz inmensa, que es Dios, algo semejante a como se ven las personas en el espejo, cuando delante pasó un obispo vestido de blanco. Tuvimos el presentimiento de que era el Santo Padre. Vimos varios otros obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una escabrosa montaña, encima de la cual estaba una gran cruz, de tronco tosco, como si fuera de alcornoque como la corteza. El Santo Padre, antes de llegar allí, atravesó una gran ciudad, media en ruinas y medio trémulo, con andar vacilante, apesadumbrado de dolor y pena. Iba orando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino. Llegando a la cima del monte, postrado, de rodillas a los pies de la cruz, fue muerto por un grupo de soldados que le disparaban varios tiros y flechas, y así mismo fueron muriendo unos tras otros los obispos, los sacerdotes, religiosos, religiosas y varias personas seglares. Caballeros y señoras de varias clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la cruz estaban dos ángeles.

2023-02-03

345.- Los Secretos de Fátima (I)


Autor: Riskov

En mayo de 1917 tres niños pastores portugueses afirmaron haber hablado con la Virgen María y que les había confiado tres secretos en forma de profecías.

Los dos primeros secretos se revelaron en 1941. Lucía escribió:

"Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra.

Hundidos en este fuego [estaban] los demonios y almas, como si fuesen brasas transparentes y negras o bronceadas con forma humana, que flotaban en el incendio llevadas por las llamas que de ellas mismas salían, juntamente con nubes de humo, cayendo para todos los lados, semejantes al caer de las chispas en los grandes incendios, sin peso ni equilibrio, entre gritos y gemidos de dolor y desesperación, que horrorizaba y hacía temblar de pavor. Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros.

Esta visión duró un momento, y gracias a nuestra buena Madre del Cielo, que antes (en la primera aparición) nos había prevenido con la promesa de llevarnos para el cielo.

Si así no fuese, creo que habríamos muerto de susto y pavor."

El segundo misterio reza:

2023-01-27

344.- Teístas utilizan a Einstein como autoridad


Autor: Riskov

Albert Einstein habló sin reparos de su religiosidad; gracias a ello disponemos de muchas citas suyas, con las cuales podemos hacernos una idea de su complejo pensamiento.

Einstein se refería a Dios como la Naturaleza, cercano al Dios de Spinoza o al panteísmo. En la entrada 7 de este blog se profundiza en la religiosidad cósmica de Einstein; algo así como el orden y las leyes naturales, unido al espíritu que deben tener los científicos para desentrañarlas. "Soy un no-creyente profundamente religioso. De alguna forma, esta es una nueva clase de religión. (…) Nunca he atribuido a la Naturaleza ningún propósito u objetivo, ni nada que pueda entenderse como antropomórfico. Lo que yo percibo en la Naturaleza es una estructura magnífica que solo podemos comprender muy imperfectamente, y eso debe llenar a cualquier ser pensante de un sentimiento de humildad. Este es un sentimiento genuinamente religioso que nada tiene que ver con el misticismo".

Lo que es llamativo es la utilización de Einstein como figura de autoridad por parte de teístas (creyentes en el dios personal). En redes podemos ver publicaciones de cristianos en las que se pretende defender el monoteísmo con citas del científico.

2023-01-17

343.- Alguien dice que Hitler era ateo


Autor: Riskov

De vez en cuando nos podemos tropezar en las redes con argumentos de autoridad contra el ateísmo tales como que Hitler era ateo. Veamos qué dicen los hechos…

En su libro autobiográfico y donde expone su visión política, "Mi Lucha", Adolf Hitler escribe:

"Lo cierto es que somos criaturas y que existe una fuerza creadora. El pretender negar este hecho es una tontería. Todo aquel que cree en algo, aunque sea algo erróneo, es superior a aquel que no cree en nada."

"La Naturaleza eterna inexorablemente venga la transgresión de sus preceptos. Por eso creo ahora que, al defenderme del judío, lucho por la obra del Supremo Creador."

"El objetivo por el cual tenemos que luchar es el de asegurar la existencia y el incremento de nuestra raza y de nuestro pueblo; el sustento de sus hijos y la conservación de la pureza de su sangre; la libertad y la independencia de la patria, para que nuestro pueblo pueda llegar a cumplir la misión que el Supremo Creador le tiene reservada."

2023-01-04

342.- El sufrimiento como castigo


Autor: Bernat

El castigo es una pena que se impone a quien ha cometido una infracción o delito. En la actualidad, los sistemas jurídicos y penales modernos y democráticos actúan como un mecanismo disuasorio al amenazar al posible delincuente o infractor de las leyes con la cárcel o pagos pecuniarios, más conocidos como multas. No obstante, durante prácticamente toda la historia de la humanidad, el castigo ha consistido en la aplicación de tormentos, torturas, vejaciones, humillaciones y otras acciones denigrantes que no buscaban solo la disuasión, sino que satisfacían, en cierta manera, la morbosidad y el placer que muchos hallaban en la contemplación del sufrimiento ajeno. Esa circunstancia era apoyada por la absurda idea de que a los dioses les gustaba que se le ofrecieran sacrificios y, en el caso del cristianismo, se llegó al punto máximo de creer que “el hijo de Dios” se sacrificó él mismo para “salvar a la humanidad”.

Hoy en día, afortunadamente, hemos erradicado –al menos en Occidente- todo tipo de sufrimiento físico como castigo limitándonos al encarcelamiento y las multas. Dicha circunstancia obedece a un cambio de mentalidad que ha sido posible gracias a la emancipación del hombre moderno respecto de las cadenas alienantes de la religión que impedían el avance social, democrático y científico y que ha desembocado en la recuperación de la dignidad humana que fue pisoteada por las instituciones cristianas durante siglos.